El pounti, también llamado picoussel, es un plato campesino originario de Cantal. Esta receta combina a la perfección dulce y salado, y resulta fácilmente transportable, lo que la convirtió antiguamente en uno de los platos favoritos de los pastores y campesinos.
El pounti es una especie de pastel hecho de harina de trigo, huevos, leche, hojas de acelga, tocino y ciruelas. Una vez elaborada se divide en trozos que se doran en una sartén muy caliente. Por lo general, se sirve acompañado de ensalada para aligerar el conjunto. El pounti también resulta un excelente acompañamiento para las aves de corral u otro tipo de carne blanca.
Para acompañar este pastel de Cantal un vino bien frío, como por ejemplo un Saint-Pourçain, siempre resulta bienvenido.