El tian, un gratinado de verduras, es una receta provenzal cuyos orígenes se remontan a la Edad Media y cuyo nombre procede del plato de tierra cocida en el que se cuece. Antiguamente, este plato se cocía en el horno banal, el horno comunal, y luego en el del panadero hasta mediados del siglo XX.
Esta especialidad del Comtat Venaissin se elabora habitualmente con verduras, como por ejemplo acelgas, calabacines, tomates, berenjenas, alcachofas, espinacas, calabaza o col, y se cubre con ajo, queso, hierbas y a veces una mezcla de nata y clara de huevo. Existen variantes de tian con pescado, con carne, con queso o incluso dulces. Todo ello, se cuece lentamente en el horno, para finalmente servirse templado con un vino tinto o rosado de la región.