Elaborada originalmente con guisantes frescos, esta sopa de guisantes partidos debe su nombre al conde de Saint Germain, ministro de la guerra en el siglo XVIII. Para realizar esta sabrosa receta, basta con cocer lentamente en una cazuela con agua y un ramillete de hierbas guisantes partidos con tocino y cebolla previamente rehogados en mantequilla, para luego machacarlo todo y añadir un poco de nata fresca. Esta deliciosa sopa se sirve bien caliente, y se puede acompañar de picatostes con ajo.